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Kazajistán está considerando nuevos estándares de adquisición para maximizar la eficiencia y efectividad del gasto estatal, al tiempo que busca minimizar el daño ambiental de las obras y servicios públicos.
Los contratos gubernamentales para bienes, obras y servicios totalizaron alrededor de $19.7 mil millones en 2023. En el pasado, las preocupaciones ambientales no se consideraban mucho en el gasto estatal. Pero ahora, los funcionarios están empezando a enfrentar la necesidad de abordar el legado soviético de degradación ambiental, incluida la radiación causada por las pruebas nucleares y el procesamiento de combustible, la reducción del Mar de Aral y una serie de desafíos más pequeños, pero igualmente graves. El calentamiento global amenaza con exacerbar los problemas existentes y crear otros nuevos, incluida una creciente escasez de agua.
A finales de 2022, el presidente Kassym-Jomart Tokayev dirigió al gobierno a desarrollar nuevas reglas de adquisiciones "amigables con el medio ambiente". Más tarde, el Ministerio de Finanzas elaboró un marco en el que el control de calidad y el impacto ambiental, además del costo, se tienen en cuenta en la adjudicación de contratos gubernamentales.
El 15 de mayo de este año, la cámara baja del parlamento kazajo, la Mazhilis, aprobó el proyecto de ley redactado por el Ministerio de Finanzas en su segunda lectura. Los defensores esperan que las nuevas reglas puedan recibir la aprobación parlamentaria y la firma presidencial antes del 1 de julio, pero reconocen que es posible que no se cumpla ese plazo.
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En febrero de 2024, Kazajistán se unió al programa SWITCH-Asia de la Unión Europea, bajo el cual Astaná puede recibir apoyo internacional de expertos para la implementación de mecanismos de adquisición pública sostenible/verde. Las subvenciones de SWITCH-Asia fomentan que las empresas y gobiernos implementen "tecnologías más limpias y prácticas industriales más sostenibles" en una variedad de sectores, incluidos la agricultura, textiles, tránsito de mercancías y turismo. El programa también tiene un componente diseñado para fomentar que los edificios residenciales sean más energéticamente eficientes.
Los representantes del programa SWITCH afirman que al tomar decisiones de adquisición, los funcionarios a menudo se centran en obtener bienes y servicios al menor costo. Pero hacerlo puede tener consecuencias a largo plazo para la sociedad y el medio ambiente. Los expertos del programa ayudan a los funcionarios a ver el panorama completo.
"Cualquier producto o servicio que la gente compre tiene impactos negativos no deseados. ... El gobierno, como el mayor consumidor del país, tiene la oportunidad de reducir estos impactos negativos al exigir productos sostenibles y más verdes", dijo Sanjay Kumar, un experto senior en adquisiciones públicas verdes para el programa.
"Es necesario hacer un cambio en las prácticas actuales y adoptar una política que fomente la integración de criterios y requisitos de sostenibilidad ambiental y social en las decisiones de compra", agregó Kumar. "Una nueva política de este tipo ayudará al gobierno a lograr un crecimiento socioeconómico a largo plazo y mitigar los desafíos ambientales".
Estos desafíos están creciendo con cada año que pasa. Por ejemplo, el volumen de residuos peligrosos generados en Kazajistán en todos los sectores económicos, desde la minería y la manufactura hasta la agricultura, la atención médica y el transporte, aumentó un 84 por ciento en 2022, en comparación con el total del año anterior.
Algunas agencias gubernamentales ya están implementando medidas ecológicas. Nurbibi Aldanova, una funcionaria del Ministerio de Comercio, informó en una reunión de SWITCH-Asia en marzo que Kazajistán está desarrollando nuevos estándares para la utilización de residuos, etiquetado ambiental y gestión ambiental como parte de una estrategia gubernamental para lograr la neutralidad de carbono para 2060. Los nuevos requisitos de adquisición reflejarán esos estándares.
En la misma reunión, Enlik Mukanova, una experta del Ministerio de Industria y Construcción, dijo que las enmiendas adoptadas en 2022 obligan a las agencias estatales a adquirir bienes duraderos con altas calificaciones de eficiencia energética. Sin embargo, el sistema está lejos de ser perfecto. Una auditoría reciente de más de 3,000 artículos adquiridos por agencias gubernamentales, incluidos refrigeradores, televisores y aires acondicionados, encontró que solo el 63 por ciento cumplía con los requisitos de eficiencia energética.
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Los representantes del programa SWITCH-Asia ayudarán a familiarizar a los funcionarios de adquisiciones kazajos en una variedad de agencias estatales con estándares verdes globales, con el objetivo de asegurar que los objetivos delineados en la legislación pendiente se cumplan en la práctica.
Por Nurgali Rakhmanov, Aida Bapakhova, Dinara Kanibay via Eurasianet.org
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